Sal del trance de “los hombres tardan segundos en arreglarse” y dale a tu barba impactante la oportunidad de brillar. El cuidado masculino es un régimen que frecuentemente elimina la importancia de mantener tu barba, para lograr el look perfecto más allá del rostro. Realza tu personalidad sin afectar tu rutina diaria, con los esenciales para el cuidado de la barba Striking Viking… ¡cuidadosamente elaborados por el ángel de las barbas!
¿Te arreglas de pies a cabeza para un evento importante o simplemente para un día casual en el sendero? ¿Por qué olvidar la barba? No, no es ciencia espacial, ni toma décadas. Striking Viking hace que el cuidado personal sea simple pero efectivo, todo mientras añade un acabado limpio a tu atuendo general. Los peines y cepillos ayudan a desenredar tu gloriosa barba sin esfuerzo, deslizándose por tu vello con facilidad, y con la ayuda de los lujosos aceites y bálsamos, aportan una mano generosa. Domina tu barba y añade un toque organizado y sofisticado a tu look.
Los productos que ofrecemos están compuestos de amor y cariño para esa barba de aspecto rudo que no es tan ruda. Sabemos que le da un aire varonil al look que llevas, pero también estamos bien informados de los hechos. Tus folículos de la barba y la piel debajo son sensibles a los químicos y sustancias sintéticas. Así que es momento de disfrutar estos kits para el cuidado de la barba elaborados de manera natural y kits para el crecimiento de la barba. El peine de sándalo natural y el cepillo de pelo de jabalí peinan delicadamente tu barba, distribuyendo de manera uniforme los aceites naturales en tu vello facial. Los aceites y bálsamos contienen extractos de sándalo, jojoba, argán, aloe, manzanilla, una variedad de aceites exóticos y manteca de karité para ayudar a realzar tu barba de forma natural.
Así que encuentra el mejor kit para el cuidado de la barba para una barba perfectamente fluida, o incluso para tu barba incipiente, y deja un aire de clase que perdura, haciendo que todas las miradas se giren dondequiera que vayas.
